Ir al contenido principal

Nos hemos abandonado

A sus 96 años me recibió el maestro Eusebio Hernández Castillo detrás del escritorio de su escuela en la colonia Zaragoza, atiende los problemas de cinco zonas con ochenta y tres escuelas de su sector. No aparenta su edad y, hasta donde él cree, no tiene pensado jubilarse de su trabajo. Don Eusebio fue un pionero de la educación revolucionaria; previo a Mendizábal, a Ramírez, a Moisés Sáenz, con las escuelas de circuito, el primer experimento nacional de la Secretaría de Educación Pública vasconceliana.

El profesor Hernández Castillo perteneció a esta estirpe de maestros antiguos, profesores que casi en cada pueblo del país animaron con su entrenamiento y sus cualidades, no solo la alfabetización de los mexicanos, sino la instrucción cívica elemental de los pueblos. Cuando los maestros fueron, en las primeras décadas del siglo XX, los gestores de una incomprendida modernidad que en muchos pueblos tardó en llegar, y en algunos lugares, la esperan aún. Era el año 2001.


Nací en Tehuacán, estado de Puebla. Mi vida era muy modesta, ahora sí, en 1907 cuando ya se gestaba la Revolución, que estalló en 1910, usted lo sabe. Mis padres eran Eusebio Hernández López y Crecenciana Castillo Muñoz. Modestamente era trabajador de construcción de casas, era albañil. Mi madre hacía los quehaceres del hogar.

Esto era más o menos ocurrió por los años 1925, 27, algo así, cuando empezaron a funcionar o se crearon las escuelas rurales a raíz de la fundación de la Secretaría de Educación Pública, cuyo secretario fue el licenciado José Vasconcelos. Al correr del tiempo vinieron otros, les decían ministros, ministros de educación, y se crearon unas escuelas llamadas de Circuito, pagadas por el pueblo, o sea la comunidad, porque, desde entonces, como hoy, el presupuesto para educación era muy reducido. No sé por qué, ahora que ya soy demasiado adulto, todo mundo: “que por la educación”. Sí, se ha beneficiado mucho, pero no de manera total, sino parcial, lamentablemente todavía tenemos un gran porcentaje de población, de ciudadanía analfabeta, no obstante que en la época de un buen gobernante, como hubo muchos, se hizo una gran obra. Y entonces se crearon las escuelas de Circuito, pagadas por la comunidad.  Y yo fui uno de ellos, antes de tener plaza oficial, plaza de gobierno. Ni título, lo reconozco. Pero, como dicen, los libros, grandes amigos, grandes consejeros del hombre, de la humanidad, me sirvieron de mucho y apliqué lo poco que aprendí. Lo apliqué, lo llevé a mi comunidad y me seguí en el magisterio, pagado por la comunidad. Cada semana, alguien salía de casa en casa a pedir la colaboración. Y me acuerdo que mis padres hablaban también de cooperación de la época de Porfirio Díaz, porque también en esa época la educación no fue bien atendida, sino solo educación para los ricos o para los hijos de los ricos. ¿Para los pobres cuándo? Porqué los millones y millones de mexicanos analfabetas, que todavía los hay, todavía los encontramos, entonces estaban en todas partes. Bueno, pues mis padres hablaban de que “ya llegó el cobrador”. Viene por el “Chicontepec”. Qué cosa es eso, preguntaba a mis hermanos. Yo era muy joven, un morrillo. “Es el pago para el maestro”. Desde entonces ya se pedía apoyo económico de los padres de familia para medio –tal vez–, solventar el llamado salario, sueldo o remuneración del maestro, que hoy sigue siendo modesto, para no entrar en más detalles.

Todavía en la actualidad leo en las revistas, en los periódicos, que gana más un bolero, que gana más equis persona. Esa es la política. Eso y más merecemos porque nos hemos abandonado nosotros mismos, muy a pesar de que se hizo la Revolución. Los que salieron ganando fueron los vivales de la Revolución, porque los maestros se fueron a la Revolución, digo yo y lo he comprobado, para defender sus propios intereses, porque no aceptaron así como así que las tierras que usufructuaban no volvieran a los campesinos. Lo tenemos comprobado, la vida actual nos lo está diciendo. Ranchos por aquí, pero de fulano, de zutano. Ahora ya no son de los generales, son de los políticos. En cambio, hay campesinos desarrapados, como nosotros también, los maestros, los campesinos sin tierra, sin recursos para cultivarla. Siquiera un pedazo de tierra para obtener de ella lo necesario, lo indispensable para poder sostener la vida. No para tener coches, dos o tres y ya, hijos en colegios y ahí te va…

Al recibir mi primera orden para ser maestro de Circuito, me decían: “su sueldo lo recibirá de la comunidad”. Veinte pesos mensuales, veinticinco en otras comunidades que tenían más apoyos, y así vine. Trabajé  tres años como maestro de circuito: 27, 28 y 29. Y en 1931, al darse cuenta que más o menos la pude hacer como maestro de circuito, me dieron mi nombramiento de maestro rural de parte de la secretaría. Entonces sí, ya me sentí seguro, confiado, estimulado: dije “ahora me toca a mí corresponder y demostrar que sí las puedo. Y le voy a entrar con más ganas, la voy a seguir”. Ahora sí, dije yo, ya voy a ganar, pero seguro, ya no me lo va a dar el pueblo. Ya no se va a sacrificar la comunidad, va a ser de parte del gobierno. Y mi nombramiento dice todavía: “tendrá usted un sueldo mensual de cuarenta y cinco pesos”. Mi nombramiento ya oficial. Feliz de la vida, me sentí millonario.


¿Usted se imagina: 45 pesos en aquella época cuando el litro de leche costaba 10 centavos, que había panes de a centavo…?  

.

Comentarios

  1. AUN VIVE EL MAESTRO? QUISIERA PLATICAR CON EL

    ResponderEliminar
  2. Gracias por escribir, Cavo profundo, el maestro Eusebio tenía 93 años cuando lo entrevisté y de eso hace 20 años. No, no vive aún, espero que no. Pero nos ha dejado sus palabras.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

San Miguel Tenextatiloyan y la Historia. PARTE 1

En 2011 tuve la experiencia de trabajar en un proyecto de Sergio Mastretta para hacer un levantamiento testimonial en la población alfarera de Tenextatiloyan en el umbral de la Sierra Norte de Puebla. Durante 10 meses hicimos decenas de entrevistas para entender el proceso de la alfarería de uso doméstico tradicional e hicimos un informe muy parecido a uno libro testimonial que terminó en el escritorio de nuestros empleadores (en una dependencia federal), que entonces estaban   muy interesados pero que súbitamente dejaron de estarlo porque les quitaron el puesto y se olvidaron de su interés, como suele suceder con las “pasiones” oficiales en este país. Me tocó investigar y redactar la parte histórica de la región, algo que me llevó hasta el preclásico tardío, como nos suele suceder a quienes no tenemos intereses tan esporádicos. Aquí la historia antigua de este entrañable rincón en donde los mexicanos, y en particular los poblanos, se han surtido de cazuelas y jarritos a lo largo...

Los trajes femeninos tradicionales de Puebla

Nahuas de Cuetzalan, Puebla Los domingos por la mañana la plaza de Cuetzalan, desierta entre semana se llena de puestos y ruido. Bajo la torre del reloj, a la sombra de las palmeras, en las anchas escalinatas, se sientas las mujeres nahuas, que vienen al mercado a vender verduras, guajolote, fruta y cal para las tortillas. Las mujeres llevan una blusa de escote cuadrado, con bordados al pasado rojos, azules o negros alrededor del cuello y de las mangas. Las mujeres llevan enredo, hecho con dos lienzos, que llega al tobillo; lo pliegan en un solo tablón atrás, del ancho de las caderas y en cuatro tablas más pequeñas que se encuentran enfrente, usan enredos que sujetan en la cintura por medio de un cinturón de lana roja con dibujos geométricos. Usan un huipil de encaje, adornado con una cucarda de listón azul o morado igual al listón que bordea el escote. Las mujeres de Cuetzalan utilizan un enorme tocado que en días de fiesta alcanza 50 cm. de alto, hecho con estambres de l...

Malinowski y el método etnográfico

Llamado padre de la antropología moderna, Bronislaw Malinowski (1884-1942) se tomó su tiempo para crear una metodología del trabajo de campo. Lo que dice puede parecer obvio, pero al salir al campo nunca está de más recurrir a sus sensatas recomendaciones. Este es mi resumen. Debe ser ¿cómo hacer? “Los resultados de una investigación científica, cualquiera sea su rama del saber, deben presentarse de forma absolutamente limpia y sincera. “… una descripción exacta de los aparatos utilizados; la manera en que fueron encausadas las observaciones; su número; el lapso de tiempo que le ha sido dedicado y el grado de aproximación con que se hizo cada medida. “… cada investigador debe poner al lector en conocimiento de las condiciones en que se realizó el experimento o las observaciones.” Los tres principios metodológicos “Los principios metodológicos pueden agruparse bajo tres epígrafes principales: a)          el estudio debe albe...