jueves, 26 de octubre de 2017

Todos aprenden

La maestra Clara viaja desde Oaxaca a Zacatepec para instruir a sus niños de educación especial. Unas seis horas de viaje de la capital del estado a la región de los tacuates cercana a la costa del Pacífico y a la frontera con el estado de Guerrero. Contagia el entusiasmo de la maestra Clara, su don de gentes y simpatía. Al final de nuestra estadía en Zacatepec nos pidió aventón a Oaxaca, iba cargada de la codiciada miel de la hormiga comestible llamada chicatana, unas bolitas transparentes que las hormigas producen en muy pocos lugares, entre ellos Zacatepec. “Cada vez que vengo –y es temporada- regreso cargada de chicatana”, nos dice. En el camino nos reveló otra de sus cualidades: es orquideóloga. Paramos en el camino para que ella, con ayuda del chofer Jorge Escudero, pudiera descolgar de algunos árboles sus preciadas orquídeas.


17 de junio de 2011

Centro de Educación Preescolar “Lic. Benito Juárez” de Santa María Zacatepec, Oax.
Prof. Clara Pascual García

Mi nombre es Clara Pascual García, estamos en la escuela “Lic. Benito Juárez” de Santa María Zacatepec, Putla, Oaxaca. Estudié una maestría en enseñanza educativa especial,  pero antes, por un problema familiar que tuvimos, empecé a ir al Teletón y me empecé a interesar en estos problemas. Ahorita estamos trabajando con braille, también un poco de lenguaje de señas. Aquí he estado trabajando con un  niño con síndrome de down y me gusta mucho, la enseñanza y la terapia.

Aquí en la escuela tenemos seis niños, nada más que a veces vienen y a veces no. Aquí en Zacatepec la mayoría habla español, o sea que por ese lado no tengo problema, enseño en español. De mi trabajo me gusta todo, me gusta trabajar con los niños, también que sobresalgan, que no porque son niños con alguna necesidad se queden ahí, sino que aprendan; todos los niños aprenden, sea un niño con down o con parálisis cerebral, todos aprenden. Entonces, pues, trabajo para ayudarlos a mejorar su vida. Bueno, no solo la vida de ellos, sino también la de sus papás, de sus hermanos. Pues muchas veces un papá tiene un hijo con alguna discapacidad y lo que hace es esconderlo, no los sacan o niegan que sea su hijo.

Mi principal obstáculo es que muchas veces los niños no vienen, por muchas razones, los papás a veces no tienen tiempo, los niños se enferman; a veces no encuentran el material que uno les pide y no vienen. Pensaba que iba a venir alguien del programa donde nosotros hemos asistido, que es Necesidades Educativas Especiales, pero veo que no. Y la verdad sí tenemos muchas dificultades en cuanto al material, porque a veces no lo tenemos a la mano. Sería muy útil que nos visitaran para que vean cómo trabajamos. Por ejemplo, si usted se da cuenta, aquí tengo mi alfabeto incompleto porque no tengo material. Acá es difícil encontrarlo. También necesitamos agujas de caneva, ojitos de plástico, zapatos; o sea, para que ellos empiecen a trabajar todo lo que es la psicomotricidad. La verdad casi no tenemos acá material. Y sí trabajamos, aunque a veces nos critican a los maestros por esto o lo otro, se van a los plantones y cosas así, pero sí trabajamos también.

Me gusta que el niño aprenda. Ahorita no ha venido, pero él ya empieza a escribir braille. Se llama Abimelec García Marroquín, es invidente y ya empieza  a escribir, escribe palabras, oraciones cortas, tiene siete años. Lo que pasa es que también sus papás lo estimularon mucho desde pequeño, entonces ya todo fue más sencillo; estuvimos trabajando orientación y movilidad, vimos lo que es la técnica de protección y luego ya, entramos al braille. Así que le digo que no me costó mucho en ese aspecto. En su muñeco él aprendió un poco el esquema cultural, izquierda, derecha, arriba, abajo; a un lado, adelante, atrás. Es ciego congénito.

La maestra tiene una niña con hipoacusia nomás que casi no hemos trabajado con ella, porque a veces no la manda; la verdad requiere de atención y de tiempo, porque la niña, como yo apenas llegué, casi no se acostumbra a venir conmigo. Entonces eso se me dificulta, quiere estar con su maestra, pero como yo tengo otras actividades, con Abimelec es con quien más trabajo.

Muchos autores y profesores de los que he aprendido, dicen que la mejor manera de enseñar a un niño con hipoacusia es enseñarlos a oralizar; a mí como que se me hace un poco difícil porque, por ejemplo, la niña como que se comunica más a señas, es lo que ella utiliza para decir algo. Espero estar el otro ciclo escolar y trabajar con ella.

Queremos material para todos, porque ya ve que de por sí en los centros de educación preescolar lo que más se necesitan son juegos. Este alfabeto yo lo he ido haciendo con material que el niño conoce, tenemos un árbol con corteza, este algodón es de acá y representa un borreguito; ahí andamos buscando de acá para allá a ver quién nos puede regalar un poco de material. Así hemos estado trabajando. No lo he acabado porque la verdad requiere de mucho tiempo, y aparte por mis otras actividades, pues no lo puedo hacer. Estas son tablitas de triplay donde están pegadas representaciones de diferentes cosas, como cortezas de árbol con unas ramitas, tenemos peluches, una mariposa hecha de tejido, figuras con materiales diversos, lentejuelas, diamantina; un mosquito de peluche, tenemos un ave azul, un pájaro con plumas reales, tenemos una ratón con su cola de papel, tenemos un sapo, una tortuga hecha con una semilla, un venado. Con esto el niño conoce, al tacto, cosas del mundo que no puede ver.

Ojalá nos vengan a visitar más seguido las autoridades competentes, que se den una vuelta para que vean cómo trabajamos, que necesidades tenemos. Que vengan a compartir un día con nosotros, un día de clases.


Foto 2 de Marco Pacheco

..

No hay comentarios:

Publicar un comentario